Un curioso corpiño permite aumentar dos tamaños la taza femenina, al tiempo que ofrece la posibilidad de degustar de tu bebida favorita, donde sea. El "WineRack", cuenta con una bolsa transparente que permite contener hasta 750 ml de líquido -el equivalente a una botella de vino- y tiene un tubo para succionar la bebida de modo sencillo.
La original idea de Brooks Lambert surgió luego de la primera y más extraña creación: "La panza de cerveza" para hombres, que funciona de igual manera aunque sin dudas es una mucho menos atractivo.
Aunque el corpiño porta vino roza lo absurdo y ridículo, sus creadores aseguran que es el invento del siglo.
"Yo no podía dejar de sonreír y, para ser honesto, yo era el alma de la fiesta. Hay que verlo en acción para comprender el alcance de su hilaridad", relató su creador.
"Yo lo he usado a un concierto y fue la cosa más divertida que he hecho", contó la Gerente de Ventas, Knirr Annelise.
Una vez que el líquido se haya terminado su usuario puede soplar en la válvula para llenarlo de nuevo.
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