Anne Clewlow, una mujer inglesa de 34 años oriunda del estado de Staffordshire, había quedado embarazada hace sólo 9 semanas. La noticia, por cierto, le causó una gran alegría y la obligó también a concurrir a un centro médico para realizarse las ecografías de rigor y comprobar el buen estado de salud de su hijo nonato.
La prueba de ultrasonido, una práctica ya de rutina en estos tiempos, se desarrolló sin contratiempos. Sin embargo, la futura madre quedó de una pieza cuando miró detalladamente la imagen impresa del feto. Al lado de su futuro hijo podía verse como las marcas granuladas de la ecografía dejaban ver los trazos de una gran y perfecta cabeza humana, con ojos, nariz, boca, orejas, cuello e incluso cabello oscuro.
“Cuando me hice el ultrasonido y miré la pantalla, no vi nada inusual, pero cuando imprimieron la imagen, la cara era obvia”, relató la sorprendida mujer.
Pese al impacto inicial que le supuso ver la extraña imagen en la ecografía, Anne cree que a fin de cuentas podría tratarse de una especie de espíritu “protector” que vela por la salud de su hijo por nacer.
“Parece un hombre calvo. No conozco a nadie de mi familia que se le parezca, por lo cual pienso que se trata de una especie de ángel de la guarda. Aunque no soy creyente, pienso que podría ser una entidad benévola, algo que está cuidando a mi bebé”, sugirió.
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